Un minuto de silencio....

Un minuto de silencio por la paz desaparecida...
Un minuto de silencio por los valores perdidos....
Un minuto de silencio por el amor y la tolerancia mancillados....
Un minuto de silencio por la fe destruida....
Un minuto de silencio por la conciencia mutilada...
Un minuto de silencio por un mundo en agonía...
Un minuto de silencio...porque con un nudo en la garganta no se puede hablar...

Hoy una noticia unificó los pensamientos de muchos y otra vez la razón
 fue una tragedia. Una joven estudiante universitaria fue cobardemente asesinada. Desgraciadamente todos los días sabemos de hechos como éstos, la tristeza inunda muchas familias cada día, pero hoy esa tristeza alcanzó a nuestra Iglesia, una vez más.

No la conocí, pero no hace falta para sentir dolor, simplemente era Hija de Dios y por consiguiente era parte de mi familia, era mi hermana.

Pude ser yo, pudo ser mi hija, mi hermana, mi madre, mi amiga. Pudiste ser tú.

En este momento no puedo escribir, tal vez me falten palabras, tal vez me sobren, lo único que puedo hacer es elevar una oración por aquellas familias que sufren porque un ser querido ha caído en el campo de batalla en éste guerra que pronto, muy pronto ha de terminar para siempre.

¡Ven Pronto Señor Jesús, te estamos esperando!

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